En la carretera no estás solo

La carretera es la infraestructura de transporte más utilizada por los ciudadanos: el 91% de los viajes se realizan por carretera y el 84% de las mercancías en nuestro país se transportan por este modo de transporte.  

La movilidad que proporciona la carretera implica que diversos colectivos presten su servicio en ella de forma continuada, lo que repercute en una conducción cómoda y lo más segura y fluida posible.

Servicios como la atención a vehículos averiados por los trabajadores de asistencia en carretera, la regulación del tráfico por parte de los agentes de la guardia civil o la ejecución de diversas operaciones de mantenimiento por los operarios de conservación, conlleva la necesaria presencia en la carretera de todas estas personas, realizando su trabajo en condiciones de tráfico abierto. 

El Comité de Seguridad Vial de la ATC (Asociación Técnica de Carretera) realizó entre los años 2000 y 2012 un estudio sobre la accidentalidad con víctimas en tramos de zona de obra en carreteras interurbana. Una de las principales conclusiones de esta investigación apuntaba a que, entre los accidentes, el de atropello a peatones resultaba ser uno de los más frecuentes, contabilizando un 10% de los fallecidos. Si ahondamos más en esta problemática, un nuevo estudio revela que desde 2016 a 2018, en las carreteras españolas, solo en accidentes con atropellos a operarios de conservación, hubo 28 muertes. 

El documento del subgrupo de trabajo sobre “Prevención en trabajos de conservación y explotación de infraestructuras”, elaborado por la Comisión Nacional de Seguridad y Salud y en el Trabajo, expone que “la mayor parte de los accidentes de tráfico por atropello durante la realización de trabajos de conservación y mantenimiento de carreteras se producen por un vehículo ajeno a la obra (que, en numerosos casos, invade la zona de trabajo)”. 

También destaca que “en un número muy significativo de los accidentes de tráfico, los trabajadores atropellados realizaban trabajos de señalización”. 

En las empresas de conservación, la labor de prevención es una necesidad que va mucho más allá del cumplimiento formal de una normativa. Nuestras empresas informan y forman a sus operarios haciendo especial hincapié en la propia naturaleza de su actividad que se desarrolla en condiciones de tráfico abierto, minimizando siempre las restricciones a la circulación. 

La formación incluye la instrucción sobre cómo señalizar los cortes de carril, cómo colocar de forma segura la señalización, información precisa acerca de las causas y pormenores de los accidentes ocurridos… Pero la existencia de un elemento externo, como es el conductor del vehículo que circula por la carretera, de la atención que este tenga en todo momento, de la adecuación de la velocidad del vehículo a las condiciones de la vía, de cualquier posible distracción… hace que exista un elemento ajeno a la propia actividad del operario que genera un riesgo adicional. 

Consciente de esta problemática, la Asociación de Empresas de Conservación y Explotación de Infraestructuras, ACEX, lleva desde el año 2005 convocando sus Premios Nacionales a la Seguridad en Conservación, que se conceden en dos categorías: una para empresas asociadas y otra abierta a organizaciones e instituciones o personas que deseen presentar una iniciativa en el campo de la seguridad vial. Y hago esta referencia a los Premios ACEX porque el origen de la campaña “En la carretera no estás solo” reside precisamente en ellos, ya que esta iniciativa fue una de las candidaturas presentadas en la edición de 2018, en la categoría de empresas asociadas, por ALVAC, que ya había implantado esta iniciativa en su organización. 

ACEX, una vez finalizada la edición de los premios del año pasado, consideró que como asociación sectorial merecía la pena ampliar el ámbito de la campaña y liderar su desarrollo. Nuestra Junta Directiva sensibilizada y comprometida con la problemática de la accidentalidad, acogió con gran interés esta iniciativa y el reto planteado. Con este planteamiento global de expandir la acción, ofrecimos a la Dirección General de Tráfico y a la Dirección General de Carreteras del Ministerio de Fomento liderarla conjuntamente con ACEX. 

Nuestro objetivo central es alertar a los usuarios de que pueden encontrarse con operarios que están trabajando por su seguridad y concienciarles de la importancia de respetar su integridad. Asimismo, la campaña se inserta en el objetivo de salud laboral y seguridad vial de estos trabajadores con el agradecimiento por su labor diaria. 

Para alcanzar estos objetivos, la campaña se difunde en las redes sociales, en revistas especializadas, en los paneles de mensajes de la DGT y en publicidad en la radio. Además, se han distribuido 60.000 pulseras con el lema de la campaña a centros de conservación, autoescuelas y áreas de descanso de las gasolineras de todo el país, materiales y actividades encauzadas al objetivo de minimizar ese significativo número de accidentes. Ponemos nuestra voluntad y nuestro esfuerzo en esta campaña porque estamos seguros de que dará sus frutos.