La Estrategia Española de Seguridad y Salud en el Trabajo 2015-2020

Publicado el: 01/05/2015
Por: Pere Teixidó. Director técnico-científico. Mutua Universal
La Estrategia Española de Seguridad y Salud en el Trabajo 2015-2020

La Estrategia se asienta en dos principios fundamentales: la prevención y la colaboración. La prevención es el medio más eficaz para reducir los accidentes de trabajo y las enfermedades profesionales, y la colaboración de los poderes públicos, los empresarios y los trabajadores promueve e impulsa la mejora efectiva de las condiciones de trabajo.

1. Introducción

¡Ya tenemos una nueva Estrategia de Seguridad y Salud en el Trabajo! Que viene a dar continuidad a la ya vieja Estrategia 2007 – 2012.

El pasado siete de abril de 2015 se aprobó en el seno de la Comisión Nacional y el 24 del mismo mes se aprobó en el Consejo de Ministros la nueva Estrategia que tiene que conducirnos hasta el año 2020.

Nos congratulamos y nos damos la enhorabuena por la aprobación de la EESST, porque la aplicación de directrices comunes, compartidas y voluntarias en el conjunto del Estado favorece la consecución de resultados encaminados a conseguir el objetivo deseado de mejorar, de forma continua y sistemática, la seguridad y salud en el trabajo y por ende las condiciones de trabajo.

No se puede olvidar que las mejoras en las condiciones de trabajo reducen el coste derivado de los accidentes de trabajo y las enfermedades profesionales, pero esto no es todo, además debe servir de catalizador para incrementar la producción, el crecimiento económico, la generación de empleo y la mejorar de la calidad de vida de los trabajadores.
No nos cansamos de repetir, una vez más, que más allá del resultado económico está su utilidad social y personal al conseguir que haya menos accidentes y enfermedades profesionales en las empresas.

“La voluntariedad es la palanca que implementa una actividad preventiva sostenida y sostenible capaz de alcanzar una reducción efectiva de la siniestralidad”.

El bienestar en el trabajo sólo puede lograrse con una verdadera implicación y compromiso de todos, por lo que la Estrategia moviliza para la consecución de sus objetivos a las Administraciones públicas, promoviendo la integración de la prevención de riesgos laborales en el conjunto de políticas, así como a las organizaciones empresariales y sindicales, imprescindibles para lograr una mayor aproximación de las políticas al entorno laboral.

Como no puede ser de otro modo la EESST va en línea con el Marco Estratégico en materia de Salud y Seguridad en el Trabajo 2014 – 2015 , que a su vez forma parte de la Estrategia Europea 2020 “Una estrategia para un crecimiento inteligente, sostenible e integrado” . En él se contemplan como retos principales:

  • mejorar el historial de aplicación en los Estados miembros, en particular mediante el refuerzo de la capacidad de las microempresas y las pequeñas empresas para poner en marcha medidas efectivas y eficaces para la prevención del riesgo
  • mejorar la prevención de las enfermedades relacionadas con el trabajo combatiendo los riesgos existentes, nuevos y emergentes
  • y, finalmente, afrontar el cambio demográfico

Prueba de ello son los logros alcanzados en el pasado por la EESST 2007-2012 y las distintas estrategias europeas. Por ello es recomendable a todas luces seguir confiando en el binomio exitoso:

  • la combinación de la legislación, para tener un marco legal común de actuación 
  • y la EESST, para lograr de forma voluntaria, coordinada y estratégica, el objetivo buscado

2. Visión y objetivos

La nueva Estrategia Española de Seguridad y Salud en el Trabajo 2015 – 2020 tiene como visión alcanzar una sociedad en la que el bienestar en el trabajo se perciba como una realidad y no como una utopía.

El enfoque debe ir acompañado de una mejora continua de las condiciones de trabajo y de la reducción constante y paulatina de los accidentes y enfermedades profesionales. Para ello, debemos trabajar más y mejor, de manera proactiva, consolidando los logros obtenidos y fijándonos nuevas metas alcanzables que vayan más allá del mero cumplimiento de las obligaciones legales.

A continuación se recogen los dos objetivos generales, los cuatro objetivos específicos y los cuatro principios que han inspirado la elaboración de esta Estrategia.

Al igual que las 36 líneas de actuación generales que a su vez se desarrollan en medidas más concretas que se irán implementando de manera sistemática y ordenada en tres Planes de Acción: 

  • el primero se desarrollará hasta el 31 de diciembre de 2016
  • el segundo hasta el 31 de diciembre de 2018
  • y el tercero irá hasta el final de la estrategia


Objetivos generales:

  1. Promover una mejor aplicación de la legislación en materia de seguridad y salud en el trabajo y su consolidación en las Comunidades Autónomas, especialmente en las pequeñas y medianas empresas.
     
  2. Favorecer la mejora continua de las condiciones de trabajo respecto de todos los trabajadores por igual, con especial atención a la prevención de las enfermedades profesionales y enfermedades relacionadas con el trabajo.


Objetivos específicos: 

  1. Mejorar la eficiencia de las instituciones dedicadas a la prevención de riesgos laborales.
     
  2. Potenciar actuaciones de las Administraciones Públicas en materia de análisis, investigación, promoción, apoyo, asesoramiento, vigilancia y control de la prevención de riesgos laborales.
     
  3. Promover, con la participación de los Interlocutores Sociales y las Comunidades Autónomas, la mejora de las condiciones de seguridad y salud en el trabajo, especialmente en sectores, actividades, colectivos y empresas de mayor riesgo.
     
  4. Fortalecer la participación de los interlocutores sociales y la implicación de los empresarios y trabajadores en la mejora de la seguridad y salud en el trabajo.
     

Los principios que han inspirado la elaboración de esta Estrategia y que deben regir la implementación de la misma, son los siguientes:  

  • Colaboración (con la participación activa de las Administraciones Públicas, tanto Autonómicas como General del Estado, y de los Interlocutores Sociales).
  • Responsabilidad (la crisis que estamos padeciendo obliga a coordinarse y eliminar duplicidades e impulsar sinergias).
  • Coherencia (el análisis del contexto socioeconómico y el diagnóstico previo han servido de base para establecer metas y objetivos realistas y coherentes).
  • Mejora continua (se trata de una Estrategia abierta y flexible para que pueda adaptarse a la realidad en cada momento).

3. Líneas de actuación

Líneas de actuación:

Objetivo 1:

  • Potenciar y revalorizar las instituciones públicas dedicadas a la prevención de riesgos laborales y adecuar sus funciones a las demandas actuales de la sociedad.
  • Crear e impulsar mecanismos de coordinación entre las instituciones competentes en materia preventiva, tanto en el ámbito laboral, como en el sanitario, educativo y de industria.
  • Promover la colaboración institucional en el desarrollo de las políticas públicas preventivas.
  • Potenciar el liderazgo de las Administraciones Públicas en la gestión de la prevención de riesgos laborales.

Objetivo 2:

2. A . Promoción, apoyo y asistencia técnica:

  • Informar y concienciar a las empresas, con especial atención a las pymes y microempresas, sobre la prevención de riesgos laborales y la disponibilidad de herramienta oficiales que facilitan la aplicación de la normativa.
  • Mejorar la accesibilidad y aplicación de la normativa en materia de prevención de riesgos laborales.

2. B.  Vigilancia y control del cumplimiento de la normativa: 

  • Adecuar la normativa sancionadora y procedimental por infracciones en el Orden Social a los cambios normativos producidos.
  • Desarrollar actuaciones inspectoras específicas dirigidas a promover, facilitar y asegurar el cumplimiento de la normativa.
  • Mejorar y potenciar la complementariedad entre las funciones de análisis y asistencia, y las de vigilancia y control.
  • Desarrollar procedimientos de colaboración entre las Administraciones Públicas para potenciar acciones conjuntas y nuevas herramientas de actuación.

2. C. Incentivación:

  • Fomentar la excelencia en la gestión de la seguridad y salud en el trabajo mediante el reconocimiento, intercambio y difusión de buenas prácticas.
  • Promover el estudio y la eficiencia de medidas de incentivación.

2. D. Sensibilización:  

  • Potenciar la sensibilización de la sociedad en materia de prevención de riesgos laborales, con una mayor implicación de los medios de comunicación.

2. E. Educación y formación:

  • Consolidar la integración de la formación en prevención de riesgos laborales en las diferentes etapas del sistema educativo.
  • Diseñar y potenciar la formación de colectivos específicos.
  • Adecuar la normativa relativa a la formación en PRL a los cambios producidos desde su aprobación.

2. F. Información e investigación:
 

  • Mejorar la coordinación de las actividades desarrolladas por las Administraciones Públicas en materia de recopilación, análisis y difusión de información en prevención de riesgos laborales y las de estudio e investigación en dicha materia, configurando un sistema de información de calidad en materia de seguridad y salud en el trabajo.
  • Potenciar y revalorizar la Red de Institutos Públicos de Investigación en Seguridad y Salud en el Trabajo. Fortalecer la cooperación para optimizar la I+D+i en seguridad y salud en el trabajo.
  • Promover la generación de conocimiento en materia de seguridad y salud en el trabajo y mejorar su accesibilidad.

Objetivo 3:

3. A. Potenciar actuaciones de las Administraciones Públicas, con la participación de los Interlocutores Sociales, dirigidas a Sectores, Actividades, Colectivos y Empresas de mayor riesgo.

  • Impulsar la mejora de las condiciones de trabajo en sectores y actividades con elevados índices de incidencia de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales.
  • Promover la seguridad vial laboral, en colaboración con la Dirección General de Tráfico, con el objeto de reducir los accidentes de tráfico laborales.
  • Diseñar e implantar un plan de acción para la reducción de los trastornos musculoesqueléticos.
  • Promover la seguridad y salud de colectivos específicos.
  • Desarrollar y difundir metodologías de evaluación de riesgos psicosociales de referencia, que permitan un mejor conocimiento y prevención de dichos riesgos.
  • Estudiar riesgos emergentes, sus causas e impacto en la seguridad y salud de los trabajadores, en particular los derivados de las nuevas tecnologías.

3. B. Enfermedades profesionales:
 

  • Mejorar y promover el estudio y la investigación de enfermedades profesionales, así como la detección y comunicación de las mismas, con la máxima de anteponer la prevención a la rehabilitación.

3. C. Vigilancia de la salud: 

  • Promover una vigilancia de la salud más efectiva.
  • Promoción de la salud: fomentar la cultura de la salud potenciando hábitos saludables en el entorno laboral.

3. D. Gestión de la prevención en la PYME: 

  • Desarrollar instrumentos que faciliten y homogenicen la gestión preventiva en las pequeñas empresas con independencia de la modalidad preventiva elegida.
  • Promover la integración de la prevención, especialmente en las pymes y microempresas.
  • Desarrollar y difundir instrumentos que faciliten la coordinación de actividades empresariales.

Objetivo 4: 

  • 4. A – Participación Institucional:
  • 4. B – Negociación colectiva:
  • 4. C – Apoyo a las pymes:
  • 4. D – Liderazgo empresarial y participación de los trabajadores

Para alcanzar este objetivo 4 se proponen las siguientes líneas de actuación:

  • Reforzar el papel de los órganos consultivos y de participación institucional en materia de prevención de riesgos laborales.
  • Potenciar la negociación colectiva para alcanzar acuerdos que promouvan la integración de la prevención de riesgos laborales en las empresas y la implicación de los trabajadores y empresarios en el cumplimiento responsable de sus obligaciones preventivas.
  • Promover la integración de la prevención de riesgos laborales en las pymes y microempresas con una mayor implicación de los empresarios y trabajadores.
  • Promover el compromiso de la dirección de la empresa en la gestión de la prevención y la colaboración de los trabajadores en la actividad preventiva como elementos clave para una gestión de la prevención integrada.
  • Potenciar la cultura de la seguridad y salud en la empresa.

4. Conclusiones

El desarrollo de esta Estrategia 2015-2020 nos ha de permitir conocer mejor nuestras debilidades, convertirlas en fortalezas, y hacer frente a las dificultades que se presenten en el camino hacia el 2020 en aras de conseguir esa meta común de unos lugares de trabajo seguros, saludables y productivos.

Hay que saber ver la PRL como una inversión y no como un gasto susceptible de ahorrar y estar en condiciones de impulsar una cultura, clima, y prácticas laborales que coadyuven a la implantación de un ambiente capaz de promover la efectividad de la organización.
Hay que saber desenredar el nudo “gordiano” que, como siempre, se plantea "primero hay que invertir para luego recoger los beneficios". Es decir los costes de la PRL son a corto plazo mientras que los beneficios es necesario que sean sostenibles, ya que, éstos son a largo plazo.

Es de capital importancia a la hora de valorar la utilidad de la Estrategia, la repercusión de un menor número de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales en la salud y bienestar de los trabajadores, evitando disfunciones sociales y sufrimientos personales para, finalmente, lograr el equilibrio que imprimen estos resultados a la viabilidad del Sistema de Seguridad Social.
La motivación necesaria para seguir realizando actividades de P.R.L. sistemáticas y programadas se ve reforzada en la EESST, por tratarse de un emprendimiento voluntario que se lleva a cabo conjuntamente entre todos los actores relevantes, generando sinergia, de tal modo que la acción preventiva resulta sostenible y sostenida, redundando en una reducción efectiva de la siniestralidad.